Para llevar a cabo un proyecto de reestructura financiera es necesario dividirlo en diferentes fases, las cuales podemos conjuntar de la siguiente manera:
Primera fase: Marco de referencia.
Es el momento actual que está viviendo la empresa sin llevar a cabo una reestructuración financiera. Es necesario conocer, entre otros, los niveles de ventas, costos, utilidades, flujos de efectivo, rentabilidad, productividad, apalancamiento y valor de la empresa.
Segunda Fase: Marco institucional
Es el estudio que nos permite conocer a través de una simulación la situación futura de la empresa al realizar una reestructuración financiera.
Tercera fase: Estrategia de reestructuración
Después de elaborar el marco de referencia e institucional es necesario instrumentar el plan de reestructuración financiera, que consiste en seleccionar la estrategia más conveniente para la empresa; la que debe tomar en cuenta:
v El monto a reestructurarse.
v El momento idóneo.
v La forma de llevarse a cabo.
Cuarta fase: Análisis derivado de la reestructura financiera
Deben considerarse los impactos de corto, mediano y largo plazo en diferentes renglones, como:
v Costos financieros.
v Utilidades.
v Flujos de efectivo.
v Estructura de activos y pasivos.
v Niveles de apalancamiento financiero y operativo.
v Tasas de productividad y rentabilidad.
v Grado de riesgos financieros.
v Valor corporativo antes y después de la reestructuración.